Aprende a tocar la armónica en solo 21 días empezando desde cero a través de 21 lecciones en las que aprenderás todo lo que necesitas para convertirte en un bluesman con tu armónica en C.
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QUIERO EMPEZAR A SOPLAR
En esta clase vamos a hacer un resumen de los conceptos básicos (y no tan básicos) que debes tener en cuenta al empezar a tocar si quieres aprender de manera efectiva y no desmotivarte en el intento.
Lo primero que deberías hacer es plantearte ¿por qué quiero tocar la armónica? Parece una tontería, pero en realidad no lo es pues es súper importante tu ACTITUD FRENTE AL ESTUDIO y ese debería ser tu lugar de partida. Si quieres profundizar en el tema te dejamos este link https://harpvard.com/2020/04/06/masterclass-rutinas-con-armonica/
En resumen se trata de que te plantees cuáles son tus objetivos y metas, que te retes y que cumplas con lo que te propones. Una meta podría ser aprender una única canción con la armónica, otra podría ser convertirte en profesional del instrumento. No se trata de que la meta sea más o menos grande, se trata de que seas capaz de cumplirla y que te premies por el camino.
La elección de la armónica es importante. No te recomiendo una armónica barata en ningún caso, cómprate una de gama media. En nuestra tienda tenemos la Hohner Big River https://harpvard.com/product/hohner-big-river-en-c/ y cuesta 29,99€ pero también te valdría una Blues Harp, Special 20 o Golden Melody. Son opciones de coste intermedio y de buena calidad. Si te compras la armónica más barata es garantía de que no vas a aprender, además, estamos hablando de un instrumento que te cuesta menos de 30€ ¿cuánto te costaría una guitarra barata de gama media? ¿por lo menos seis o siete veces más? Ni te lo pienses
Otra cuestión, LA TONALIDAD DE LA ARMÓNICA. Siempre en C. Las armónicas están afinadas en distintas tonalidades pero si quieres aprender a tocar desde cero y aprovecharte de la gran mayoría (por no decir la totalidad) de material de pago o gratuito para aprender a tocar debes tener una ARMÓNICA DIATÓNICA EN C. Más tarde, si te gusta este instrumento tendrás que comprarte más armónicas siguiendo por la de A, la de D, la de G… hasta tener en las 12 tonalidades. Pero vamos, eso poco a poco, de momento, armónica en C.
Vamos a empezar a tocar. Tienes que saber que todos estos contenidos que veremos a continuación se ven en profundidad en nuestro curso 21 DÍAS TOCANDO LA ARMÓNICA que puedes hacer por solo 19,99€
¿Cómo se sujeta la armónica? Puedes sujetar la armónica como te dé la gana, pero hay maneras que te servirán para ganar velocidad y técnica. Normalmente sujetamos la armónica con la mano izquierda con los números hacia arriba utilizando nuestros dedos índice y pulgar a modo de pinza sobre las chapas de la armónica. Nuestro dedo corazón o medio se situará en la parte baja de la armónica para darle estabilidad a la sujeción. Intenta que tu dedo índice quede lo más alejado posible de las celdas de la armónica para que tu labio superior tenga más superficie donde apoyarse.
Ahora vamos a ver qué tal suena nuestra armónica.
La respiración es con lo que vamos a hacer sonar nuestra armónica puesto que la armónica se toca respirando. Intenta hacer sonar las celdas 123 aspirando suavemente, realiza una respiración larga y sin potencia. Tu respiración tiene que ir hacia la barriga siempre, es la manera de que no te ahogues. Ahora sopla en esas mismas celdas. A modo de curiosidad tienes que saber que acabas de tocar un acorde de G aspirando y un acorde de C soplando.
En la cantidad de aire que metas en la armónica está la clave para que la armónica suene bien o suene mal. Tienes que tener en cuenta que en la parte grave de la armónica hay que meter más aire que en la parte aguda y el arte para regularlo solo te llegará después de tocar muchas horas… tienes que enseñar a tu cuerpo; es fácil pero necesitas paciencia.
La embocadura es lo que va a hacer que podamos hacer sonar más de una celda a la vez o una solo. Para tocar notas aisladas solo tenemos que mandar callar a la armónica como si prounciáramos shhh. Tocar canciones conocidas como Oh Susana o cualquier melodía sencilla nos ayudará a practicar la embocadura y respiración.
El ritmo es la asignatura principal que nos va a conectar con la música pues puedes tocar las mismas notas de una melodía pero si cambias la duración de las mismas deja de ser esa melodía para ser algo que se parece a esa melodía.
Un buen ejercicio para practicar el ritmo y la respiración es tocar el tren con un metrónomo.
Respiración, Embocadura y Ritmo es lo que consideramos LAS TRES REGLAS PARA TOCAR BIEN LA ARMÓNICA y te recomiendo que nunca las dejes de lado.
Pero vamos a cosas efectivas ¿cómo aparentar que sabes tocar aunque no tengas ni idea? Si quieres ser el colega vacilón que saca su armónica y deja a la gente sorprendida no necesitas mucho. Te voy a dar unos consejos que funcionan al 100%
- Técnicas de wah wah y trémolo de mano – Consisten en usar tus manos abriendo y cerrando el sonido. Lo puedes practicar únicamente aspirando y soplando en las celdas 123 y tendrás para un buen rato de entretenimiento.
- El ritmo del blues – también llamado corchea swing, es como pronunciar Tá-a-ta Tá-a-ta. Puedes hacer eso mismo mientras aspiras y soplas. Con eso puede acompañar de manera rudimentaria cualquier blues en G.
Pero dejémonos de engañarnos ¿de verdad quieres aprender a tocar? Si es así, deberás trabajar muy muy muy bien la escala diatónica en la armónica. Esa es la que conoces de toda la vida pero tocada en la armónica:
Do (+4) Re (+4) Mi (+5) Fa (5) Sol (+6) La (6) Si (7) Do (+7)
Entiéndanse los números que aparecen junto a las notas como los números de las celdas que hay que soplar (si tiene el signo “+”) o aspirar (si tan solo aparece el número. A este código numérico se le llama TABLATURA DE ARMÓNICA y no es universal por lo que es muy probable que en cada fuente que consultes sea distinto aunque puede que parecido a este.
Una vez que tengas esto deberás entender y memorizar la DISTRIBUCIÓN DE NOTAS EN LA ARMÓNICA DE C, entender los conceptos de TONO Y SEMITONO y de ahí lanzarte hacia el siguiente paso: EL BENDING.
El bending es la técnica de armónica con la que podemos tocar notas que de normal no suenan, es decir, podemos tocar más de una nota distinta en una misma celda ¿magia? Esta técnica lleva su tiempo de dominar, pero es con la que nos introduciremos en los mundos más molones de esta armónica: el blues.
Para entender bien el blues tendremos que entender el esquema de blues de 12 COMPASES y trabajar la escala de blues, que es una escala pentatónica menor a la que se le ha añadido una nota (blue note).
Una vez trabajado estaríamos preparados/as para entender las cuestiones sobre TONALIDAD y POSICIONES, o lo que es lo mismo, qué armónica usar para cada canción o qué tonalidades distintas se pueden tocar con una misma armónica.
Tras toda esta teoría deberíamos trabajar TECNICAS DE ARMÓNICA BLUES como el trino, double stop, vibrato, overblow, etc.
Y conforme sigamos aprendiendo habrá nuevos retos como grabarte tocando, tocar con más gente, sacar una canción de oído, transcribir una canción, tocar otros instrumentos, etc. pero el objetivo de esta clase es que veas de manera resumida cómo abordar el estudio de la armónica y cuáles serían los primeros pasos a seguir.