¿cuánto tiempo debo dedicar a mi instrumento si quiero aprender a tocar? ¿a qué edad es aconsejable empezar? ¿será demasiado tarde para mí? ¿por qué no me salen los bendings? ¿por dónde empiezo? ¿debo saber música para tocar un instrumento?
Desde que empezamos a hacer tutoriales de armónica son muchas las preguntas así que habéis realizado. Es bueno que tengáis esa curiosidad así que vamos a intentar abordar el tema resumido en:
10 CONSEJOS PARA APRENDER A TOCAR
Aprender a tocar cualquier instrumento es un camino duro y difícil; tendrás que practicar mucho hasta que puedas tocar sin pensar y es posible que nunca estés contento con tu sonido ni con lo que estás tocando porque pensarás que lo puedes hacer mejor.
Al aprender a tocar un instrumento inevitablemente desarrollamos una capacidad mecánica con nuestros músculos: tenemos que decir a nuestro cerebro paso a paso qué hacer para que suene una determinada nota, acorde o melodía. Mediante este proceso se desarrolla lo que llaman memoria muscular. Es decir, una vez que has enseñado a tu cerebro el camino llegará un algún momento en el que no tendrás que pensar en cómo hacerlo y saldrá de forma automática. Durante el día hacemos infinidad de cosas de manera mecánica sin darnos cuenta como por ejemplo cepillarnos los dientes o comer con cubiertos (no pensamos en cómo usar cada uno de nuestros dedos para sujetarlos ni en cómo mover nuestra muñeca para pasar la comida del plato a nuestra boca). Ese proceso de aprendizaje es muy similar al que empleamos para tocar un instrumento musical.
En el caso de la armónica la memoria muscular se podría aplicar a la embocadura, al paso de una celda a otra, a los bendings, a la respiración, etc. Pero hay otra cuestión fundamental que no tiene nada con la memoria muscular: la musicalidad.
Hablar de musicalidad es hablar del código de la música y de cómo lo aplicamos a la hora de tocar. Cuando empezamos a tocar un instrumento pensamos de la siguiente manera: “hago esta serie de pasos y el instrumento me devolverá los sonidos que estoy esperando” mientras que el planteamiento debería ser el siguiente: “quiero que el instrumento produzca esta melodía así que haré esta serie de pasos mecánicos”. Tener musicalidad es pensar en lo que vas a tocar antes de tocarlo, es poder cantar la melodía mentalmente antes de tocar. Si nos paramos a pensar, tanto el lenguaje como la música son códigos ¿no? Cuando vas a hablar piensas en lo que vas a decir e incluso piensas cómo va a sonar durante un instante antes de hablar ¿verdad? Con tu instrumento debería ser lo mismo: pensar en qué vas a tocar antes de tocarlo o no tocar por tocar y que el instrumento te devuelva sonidos.
¿Y por qué te cuento todo esto? Pues porque cuando empezamos a tocar es inevitable concebir la tocata como algo mecánico de pero en algún momento tenemos que cambiar el chip y empezar a aplicar la musicalidad.
Este paso no viene de un día para otro y es aquí donde la mayoría de la gente deja de tocar pensando: es muy difícil, hay que estudiar mucho, esto no es para mí, etc.
Es normal pensar en todo eso si no se tiene en cuenta una cuestión muy importante: todo proceso de aprendizaje requiere un tiempo de asimilación.
Teniendo esto en cuenta la memoria muscular, la musicalidad y el tiempo de asimilación he preparado 10 consejos que espero que te sean de ayuda para aprender a tocar y para saber si vas por el buen camino o no. Estos consejos están basados en mi experiencia como profesor de armónica pues no soy ni pedagogo ni profesor de música titulado. Estos consejos están basados en mi experiencia enfrentándome a las dificultades de aprender música por mi cuenta y en cómo trabajo esos problemas con mis alumnos. Espero que te ayuden.
- Ten una actitud positiva frente al estudio:
Las tres palabras que más daño te harán en tu aprendizaje son ES MUY DIFÍCIL. Cuando tocas por primera vez y no te sale dices: ES MUY DIFÍCIL. Cuando intentas tocar algo que no has tocado nunca y no te sale dices ES MUY DIFÍCIL. Cuando intentas sacar una canción de oído dices ES MUY DIFÍCIL etc, etc, etc… Al decir eso te estás poniendo una barrera, te estás rindiendo, estás dirigiéndote rápidamente al día en el que dejas de tocar para toda tu vida. ¿De qué sirve entonces decir que es muy difícil? De nada ¿A quién le importa? A nadie. Siento ser tan duro pero con estas palabras pero si eres de esas personas tienes que despertar, no vas por el buen camino. La primera vez que tocas no te sale nada: ES NORMAL. La primera vez que tocas algo que no has tocado nunca no te sale: ES NORMAL. La primera vez que intentas sacar una canción no lo consigues: ES NORMAL. Es normal que no te salga, es normal que tengas que tocar algo 50 veces seguidas o más o incluso días y semanas hasta que te salga: ES NORMAL. Volvemos a lo de antes: memoria muscular, musicalidad y tiempo de asimilación. Solo tener una actitud positiva frente al estudio te hará avanzar, el resto está en tu contra.
- Diviértete:
Tocar un instrumento es difícil y puede llegar a ser muy frustrante si no te cargas de actitud positiva. Es muy importante que disfrutes del proceso de aprendizaje. Al principio puede ser muy difícil hacer sonar una nota solo pero cuando ya lo has hecho un montón de veces y lo haces sin pensar te alegra y te llena de orgullo haber pasado por ese proceso. Nunca dejes de tocar cosas que te resulten fáciles y con las que disfrutes, ya sean canciones de bandas famosas, románticas, la canción del verano o canciones para niños. Hazle recitales a tu perro o a tu gato… o a tu vecino. Estás aprendiendo porque quieres, disfrútalo. Solo una cosa más, en muchos idiomas usan la misma palabra para “hacer sonar un instrumento/tocar” y para “jugar”: ¡juega!
- Ponte objetivos alcanzables pero póntelos:
Mucha gente quiere aprender a tocar la guitarra porque quiere tocar canciones de Jimi Hendrix y el primer día de clase de guitarra se frustra porque se ve lejísimos. Lo mismo pasa con la gente que quiere aprender a tocar la armónica porque quiere tocar solo blues. Querer aprender a tocar solo blues desde el primer día es garantía de frustración. En el caso de la armónica blues no solo hay que dominar una serie de técnicas sino un lenguaje (musicalidad) propio y se tarda años en asimilar. Si estás empezando a tocar un instrumento, en este caso la armónica, debes ponerte objetivos alcanzables en plan “esta semana voy a aprender a tocar esta canción” o “esta semana voy a tocar 7 horas en total”. ¿Qué pasa si no lo consigues? No pasa nada, los planes están para cambiarlos, pero tienes que tener un plan, tienes que tener objetivos. Si no consigues el objetivo no te castigues pero si lo consigues prémiate. Tener objetivos es una gran herramienta para mantener tu motivación y tu actitud positiva. Recuerda que nadie puede hacer eso por ti.
- Toca todos los días
¿Quieres aprender? Pues no hay excusa, tienes que tocar todos los días, sobre todo al principio. Esa canción que ayer no te salía… tócala hoy. Esa velocidad de metrónomo a la que no podías tocar ayer… prueba hoy. Ese bending que no había manera de sacar ayer… practícalo hoy también. No abandones el trabajo de ayer, seguramente ayer lo hiciste bien solo necesitas un tiempo de asimilación. Si tocas todos los días mantienes tu cuerpo y tu cerebro acostumbrado a tocar y verás los frutos muy pronto. No se trata de cuánto tiempo debes tocar al día sino de tocar todos los días, en concreto: de hacer un hábito.
- Escucha música
Cuanta más música escuches más música tendrás en la cabeza y más ideas tendrás a la hora de tocar; entenderás mejor las melodías, identificarás mejor los distintos timbres de los instrumentos, comprenderás mejor los estilos. Escucha música en la que aparezcan amónicas pero también en la que no. Escucha discos enteros tal y como se concibieron desde la primera canción hasta la última. Escucha todos los estilos de música que se te ocurran. El error no es escuchar reggaetón, el error es escuchar solo reggaetón.
- Intenta tocar todas las canciones que se te pasen por la cabeza
Desarrollarás tu musicalidad y tu estilo si sales de tu zona de confort, si intentas tocar cosas que no hayas escuchado tocar a nadie o como no lo ha tocado nadie; te equivocarás y sufrirás… si estás sufriendo es que estás aprendiendo. Tienes en tus manos un instrumento que hace melodías; intenta imitar las melodías de las voces que escuchas en una canción, de los vientos, de los violines, de los teclados. Esto es un ejercicio muy bueno para encontrar tu voz con el instrumento y al fin y al cabo ¿no queremos aprender a tocar un instrumento porque lo que queremos es expresarnos con él?
- Estudia música
Estudiar música te va a hacer tener más recursos y no basar tu aprendizaje solo en lo que otras personas te enseñen. Entender la música te brinda las puertas de un conocimiento mucho más amplio del que hay en las grabaciones y en los discos. Tristemente cuando pensamos en “estudiar música” nos viene a la cabeza inevitablemente una imagen: un pentagrama lleno de notas que no entendemos ¿verdad? Y nos da miedo, y pensamos que ya somos demasiado mayores para eso y pensamos que requiere demasiado esfuerzo y pensamos que no queremos eso, que realmente queremos tocar y olvidarnos… ya nos estamos poniendo otra vez un muro. Leer un pentagrama a primera vista es una habilidad más dentro de tu aprendizaje pero no es sinónimo de aprender música. Puedes aprender música sin aprender a leer las notas de un pentagrama. Saber música es entender conceptos como qué es una escala, una distancia tonal, un acorde y aplicarlos a tu instrumento. Es saber lo que es un compás y si una melodía empieza antes, a la vez o después de que empiece el compás. Es saber qué ritmo tiene una canción y poder cantárselo al batería de tu banda. Es aplicar normas matemáticas para saber qué armónica debes usar. Estudiar música mientras aprendes a tocar un instrumento te hace hablar el lenguaje común a todos los músicos y te da la libertad de aprender lo que tú quieras.
- Escribe tus arreglos
Intenta tener un registro escrito de todo lo que tocas, tu libreta de armónica, tu libro de canciones o como lo quieras llamar pero escribe lo que toques. Si no lo haces así solo podrás usar tu memoria y te aseguro que tu memoria es muy selectiva, nunca podrás saber cómo lo tocabas antes salvo que tengas una grabación y aún así tener un registro de audio de todo lo que tocas ocupa mucho más espacio que un papel. Escribiendo lo que tocas te obligarás a aprender a escribir música. Al principio escribirás tablaturas sencillas con números de celdas aspiradas y sopladas y poco a poco, sin darte cuenta buscarás la manera de escribir con más precisión; dividirás la melodía en compases y acabarás escribiendo la duración de cada nota. Escribir tus arreglos te motivará a aprender música.
- Aplica lo aprendido en otros instrumentos
Intenta tocar las melodías que ya tocas con la armónica con un piano, con una guitarra, con cualquier instrumento. Te darás cuenta de que ya no piensas en aspirar y soplar sino en “esto debería sonar de esta manera así que voy a tocar aquí o allí” ¿te acuerdas de cuando hablábamos de musicalidad? Es justo ese proceso. Tocando en otro instrumento las melodías que ya tocas en la armónica desarrollarás musicalidad y una manera “no muscular” de entender la música que tocas. Si haces este proceso y tocas de nuevo la misma melodía con la armónica ya no será igual: será más fácil.
- Conoce músicos y toca con ellos: júntate con músicos que toquen mejor que tú.
No tengas miedo, no tengas vergüenza, la música es para compartir y un buen músico con quien toques puede ser tu mejor profesor, y encima gratis. Los músicos estamos siempre aprendiendo: aprendemos de lo que oímos, aprendemos de lo que estudiamos, aprendemos de lo que investigamos, de nuestros alumnos y sobretodo de con quien tocamos. Estamos acostumbrados a tocar con gente de más nivel que nosotros y también de menos. Tocar con todas la personas que puedas y tener siempre las orejas abiertas te hará estar en guardia y aprendiendo mucho más que en tu casa con una backing track. Pero hay algo importante: si todos tocan mejor que tú siempre serás la persona que más aprenda y eso es un gran privilegio. A mucha gente le aterra la posibilidad de hacerlo mal y que piensen “qué mal toca”, “qué malx es”, “qué hace estx aquí”, etc… y ¿sabes qué? Seguramente lo vas a hacer mal no una ni dos ni tres sino infinidad de veces y no pasa nada si eres una persona humilde y respetuosa. Los músicos ya saben si eres bueno o malo nada más subir al escenario, es como un sexto sentido con el que vivimos; si eres una persona humilde y dejas tu ego a un lado se van a volcar en ti y entre todos encontrarán una manera de entenderte y que los entiendas. En resumen, no tengas miedo de tocar con otra gente ¿qué es lo peor que puede pasar? ¿Que toques mal? Eso seguro que ocurrirá en algún momento. Lo importante es que conectes con ellos, si lo consigues pondrás en práctica todo lo que practicas en tu casa y pasarás de nivel.
Podríamos enumerara muchos más consejos como que comprarte varias armónicas, ir a ver música en directo habitualmente, hacerte colega del de la tienda de música, comprarte todos los cursos de Harpvard, etc.. Aunque yo lo resumiría todo en el primer consejo: TEN ACTITUD POSITIVA.
Si tienes una actitud positiva de cara a tu aprendizaje te vas a divertir tocando, te vas ilusionar con cada objetivo que te pongas, tendrás ganas de tocar todos los días y de escuchar música que no has escuchado nunca en busca de ideas, no tendrás miedo de aventurarte a tocar cualquier cosa que se te ocurra con la armónica (aunque no te salga) ni verás obstáculos en aprender música sino oportunidades. Si tu actitud es buena tendrás ganas de hacerte tu propia libreta de armónica en la que no solo escribirás arreglos sino que dibujarás y le pegarás pegatinas y te gustará llevarla contigo. Si tu actitud es buena siempre encontrarás un momento para aprender con tu instrumento, con cualquier otro o con gente. Si tu actitud es buena a la gente le gustará estar contigo y cualquiera te invitará a su escenario.
Curso de armónica para principiantes 21 DÍAS TOCANDO LA ARMÓNICA pincha aquí.
Hola buenas noches, quiero derte las gracias por tus videos explicativos , te hago una pregunta empeze el miercoles de tormenta a tocar armonica hace unas dos semanas,y entendi interiormente un ritmo y no me puedo desembrujar de ese ritmo jaja(ritmo latino )
Gracias,eres maravilloso.