En este post encontrarás los apuntes de la clase realizada en el INSTAGRAM de Harpvard miércoles 8 de Abril. Estamos de lunes a viernes a las 19h (hora española) retransmitiendo en directo en nuestra cuenta de INSTAGRAM @harpvard hasta que dure esta cuarentena. Estas clases se quedan disponibles durante 24 horas en la cuenta. Son efímeras (igual que esta situación) y hay que estar pendiente para verlas. Nuestro objetivo es juntarnos a aprender y que cuando todo esto acabe tod@s toquemos mejor la armónica.
Eres bienvenid@ a nuestras clases.
Si quieres aprender a tocar la armónica desde cero te recomendamos nuestro curso 21 DÍAS TOCANDO LA ARMÓNICA que puedes encontrar en www.harpvard.com, con las 21 lecciones que necesitas conocer para estar tocando la armónica en menos de un mes y solo cuesta 29,99€ (pago único) +info AQUÍ
#siguesoplando
En la clase de ayer vimos cómo sacar melodías de cualquier canción para tocarlas con la armónica.
Básicamente se trata de interiorizar la melodía (ser capaz de cantarla) y luego buscar las notas en la armónica pero ¿es suficiente con eso?
Puedes sacar la canción de oído pero ¿cómo sabrás a ciencia cierta que lo que estás tocando es lo mismo que lo que escuchaste? Y lo que es más importante ¿cómo harás para poder recordarlo?
Una opción es grabarte y de esa manera tener un registro pero si haces eso también tendrás que guardar todos esos archivos en un lugar específico y clasificar cada uno de esos archivos, además, cuando quieras recordar esa melodía tendrás que buscar el archivo y reproducirlo.
De esa manera estaríamos aprendiendo de una manera auditiva pero no olvides que desde que vamos al colegio nos enseñan de una manera visual. A tu cerebro le facilitas las cosas si tiene una referencia visual. Sería buena idea que registraras también de manera escrita lo que tocas. Vamos a aprender a escribir melodías.
La gente tiene mucho miedo a la palabra SOLFEO (que a día de hoy se llama LECTURA MUSICAL). Siente que es algo inalcanzable y dificilísimo, que si de niño no te lo enseñaron ya es tarde. Te voy a decir una cosa, no es difícil y puedes hacerlo. Leer partituras es un código como lo es los pasos que debes realizar para conectarte a internet desde un ordenador o cómo enviar un mensaje desde “whatsapp”; ¿recuerdas la primera vez que lo hiciste? Si a día de hoy no te cuesta trabajo hacerlo es porque lo has hecho muchas veces. Escribir música es igual, cuanto más lo haces menos te cuesta. Aún así, no necesitas saber leer una partitura a primera vista para escribir tus melodías. Vamos a empezar desde el principio, desde la manera más básica hasta la escritura musical estándar. Después de esto usa la manera (el código que prefieras).
En la armónica no hay un convenio acerca de cómo se deben escribir las partituras así que puedes hacerlo como quieras aunque te recomiendo que no inventes: intenta adoptar algún sistema del que ya haya bibliografía. La manera más básica es anotar cada una de las notas que tocas como números referidos a las celdas que soplas o aspiras. A este sistema lo llamaremos tablatura numérica. Si vas a tocar, por ejemplo, la escala de Do puedes escribir:
+4 (C) 4 (D) +5 (E) 5 (F) +6 (G) 6 (A) 7 (B) +7 (C)
De esta manera estás diciendo que cada vez que sea una celda aspirada no pondrás nada y cuando sea una celda soplada le pondrás un <+> a cada número. Por ejemplo, si es una nota bending puedes ponerle tantas <’> como semitonos tenga ese bending. De esta manera, la nota de A en la armónica de C en el 3 aspirado se podría representar como 3’’ (segundo bending del 3 aspirado). Este es el sistema de tablatura que usamos nosotros acompañando a la partitura.
Este sistema sirve si quieres saber qué tocar pero los sistemas de escritura musical (partituras), aparte de decirte qué notas tocar te dicen algo igual o más importante: cuándo tocar cada nota y cuánto tiempo tiene que durar.
Si usas las tablaturas como apoyo para tocar una melodía que ya tienes en la cabeza como por ejemplo cumpleaños feliz está claro que no te hace falta mucho más que la tablatura numérica pero si quieres sacar una frase blues o una melodía específica que no es tan conocida tendrás que saber en qué momento suena cada nota. En este punto debes asociar cada nota a dos coneptos:
- En qué compás o en qué parte del compás suena
- Qué figura rítmica le corresponde (negra, corchea, etc.)
Te propongo un ejercicio.
- Escribe la tablatura de una canción que te sepas. Si está asociada a una canción que puedas escuchar mejor.
- Vuelve a escuchar la canción pero esta vez cuenta en voz alta los tiempos de cada compás: uno, dos, tres, cuatro, uno, dos, etc.
- Cuenta el número de compases que dura tu melodía.
- En tu tablatura, marca el/los lugar/es donde empieza un nuevo compás
Ahora tienes una tablatura numérica separada por compases. Esto en sí ya es un gran avance frente a el conjunto de números que tenías antes. Ahora ya puedes ubicar las notas de la melodía en el tiempo y todavía no has tenido que aprender a leer corcheas, ni silencios, ni puntillos.
Vamos un paso más, ¿por qué no asocias cada número a una nota musical? No hace falta que uses un pentagrama, solo escribe sobre el número la nota que suena. Es muy importante que asocies los números de la tablatura a la nota musical que suena pues no tocamos números sino notas. De hecho el proceso debería ser el inverso: tocamos notas de las cuales conocemos el nombre y las codificamos con números que nos ayudan a saber dónde están en la armónica. Empieza a pensar en notas, al menos en las melodías sencillas, te va ayudar a entender muchas cuestiones musicales.
El siguiente paso sería dividir ese compás en el número de tiempo que tiene (normalmente serán 4) y tratar de ver qué nota caería en cada tiempo. Así, de una manera totalmente visual, puedes empezar a entender qué notas duran medio tiempo (corcheas), un tiempo (negras), un tiempo y medio (negra con puntillo), etc. Lo siguiente será asociar cada número de la tablatura con su figura rítmica, al principio sobre el mismo papel donde escribes y más tarde, en un pentagrama colocando cada nota a su altura correspondiente.
El resultado de esto sería una partitura con una tablatura asociada o también se podría llamar tablatura completa.
En la clase de hoy hemos utilizado como ejemplo la primera rueda del segundo solo de armónica de la canción You Rascal You tocada por Jerry Portnoy en su disco Down in the Mood. Aquí tienes el resultado:
